
La electricidad es un recurso impresionante que alimenta básicamente todo en nuestra vida diaria. Aunque es extremadamente útil, también puede ser extremadamente peligroso si no se maneja adecuadamente. Aquí hay algunos trucos para mantener a los miembros de tu familia y compañeros de trabajo fuera de peligro.
Aunque no lo parezca, tu cuerpo es un conductor de electricidad. Nunca intente desalojar los trozos de metal que se encuentran en los enchufes eléctricos con las manos desnudas o con herramientas metálicas expuestas. Además, evite manipular los cables desnudos de cualquier tipo, la sacudida recibida de estas decisiones arriesgadas podría resultar en una lesión debilitante. Instalar tapas de plástico en los enchufes defectuosos o no utilizados también es una buena idea. Es importante estar atento a los cables viejos y mantener un mantenimiento adecuado en casa y en el lugar de trabajo.
Es fácil olvidarse de mantener el agua lejos de la electricidad, especialmente cuando tienes que terminar el trabajo. Las electrocuciones ocurren frecuentemente en las cocinas, salas de descanso y durante las actividades laborales externas. Es importante secarse y mojarse las manos antes de manipular equipos eléctricos. Además, asegúrese de que cualquier toma de corriente con una exposición regular al agua tenga un interruptor de circuito de falla a tierra (GFCI) instalado para mantener los cortos al mínimo.
Las principales causas de las lesiones eléctricas se deben a la falta de conciencia. Apague los productos eléctricos que no esté usando y esté atento a los equipos con corriente. Asegúrese de utilizar únicamente equipos adecuados para el entorno en el que se encuentra, usando siempre el equipo de seguridad adecuado. En caso de emergencia, asegúrese de que las personas que residen o trabajan en un lugar sepan dónde y cómo cortar la corriente. Preste atención a los enchufes o circuitos de energía con corrientes excesivas que pasan por ellos. Esto puede sobrecargar fácilmente los interruptores o fusibles. Las sobrecargas también ocurren cuando un cable de alimentación funciona con un amperaje incorrecto. Si un cable eléctrico se siente caliente al tacto, significa que está en riesgo de sobrecarga.